En noviembre, la actividad de las fábricas de China se expandió al ritmo más rápido de los últimos tres años, mientras que el crecimiento del sector de los servicios también alcanzó un máximo de varios años, al intensificarse la recuperación económica del país después de la pandemia.
Los datos positivos publicados el lunes sugieren que la segunda economía más grande del mundo va camino de convertirse en la primera en librarse completamente de la carga que suponen los cierres generalizados de la industria, con datos de producción recientes que muestran que la fabricación se encuentra ahora en niveles prepandémicos.