Son símbolo de prosperidad. Los rascacielos en China dan cuenta de una economía en auge, sólida como los cimientos de cada una de estas edificaciones. Ellas albergan importantes centros financieros y de negocios.
China en la punta
De 128 edificios superiores a 200 metros de altura construidos en 2016, 84 están en China. Otros 23 se encuentran en países asiáticos como Indonesia, Corea del Sur, Filipinas y Qatar. En 2015 fueron 114 las torres construidas, 62 de ellas en China.
En 2015 también incrementó la construcción de megatorres, edificaciones con alturas superiores a los 600 metros. Las torres consideradas “superaltas” son las que sobrepasan los 300 metros. Se definen como rascacielos los edificios de más de 200 metros.
The Shanghai Tower, la megatorre
Una de esas megatorres está en Shanghái, la ciudad más grande y poblada de China, un verdadero núcleo financiero mundial. The Shanghái Tower tiene 632 metros, es el rascacielo más alto de China y el segundo en el mundo. Solo la antecede la Burj Khalifa, de 828 metros de altura, en Dubai.
Sus 121 pisos componen un edificio en forma de cilindro que gira sobre sí mismo a medida que asciende. Son 9 zonas verticales que convergen en torno a un atrio, espacio que simula una plaza. Zonas comerciales en la parte inferior y arriba hoteles, instalaciones culturales y áreas para la observación de la ciudad, integran este espectacular rascacielos.
Junto a la torre Jin Mao y el Shanghai World Financial, la torre Shanghái integra uno de los principales centros financieros de Asia. Desplazó las torres árabes Abraj Al-Bait, de 601 metros, al tercer lugar en la lista de los más altos del mundo.
Ping An Finance Center
En 2017 culminó la construcción del Ping An Finance Center, un edificio de 599 metros de altura, con 115 pisos, en Shenzhen. Es el segundo rascacielos más alto de China y el cuarto en el mundo. Está proyectada la continuación del complejo, con un rascacielos de 293 metros y 51 plantas, que albergará hotel y oficinas.
CTF de Guangzhou
El Centro Financiero CTF de Guangzhou es el tercero más alto de China, con 530 metros, y el sexto en el mundo. La Torre Oeste entró en funcionamiento en 2010 y la Torre del Este en 2016. Sus 111 pisos albergan oficinas, apartamentos y hoteles.
Shenzhen, economía en auge
Shenzhen tiene el récord de edificios de 200 metros de altura, once en total, terminados en 2016. En el segundo lugar, con seis cada una, quedaron las ciudades de Guangzhou y Chongqing.
De ciudad pesquera, en un lapso de 40 años Shenzhen pasó a ser una potencia financiera y tecnológica. El impulso lo dio el líder reformista Deng Xiaoping, quien decretó en 1980 la zona económica especial. El descenso de las restricciones a las empresas detonó el auge económico que hoy evidencian estas megaconstrucciones.
En Shenzhen está en construcción el Qianhai Financial Centre, que integrará un complejo de rascacielos destinado a oficinas. La Noble Tower fue culminada en 2005. Sus 40 pisos abarcan 193 metros de altura. El KK 100, de 442 metros de altura, tiene un diseño curvo que asemeja un manantial, símbolo de prosperidad.
Los rascacielos de China, entre los mas altos del mundo
Seis rascacielos en China se incluyen entre los 10 edificios más altos del mundo. La encabezan la Torre Shanghái, en el segundo lugar; Ping An Finance Center, en el cuarto; y el CTF en el sexto lugar.
El Shanghái World Financial Centre, con 492 metros, es el séptimo rascacielos más alto del mundo.
El International Commerce Centre, en Hong Kong, tiene 484 metros de altura y es el octavo en el mundo. La Zifeng Tower, en Nanjing, con 450 metros de altura, ocupa el décimo lugar.
Equipo EurochinaBridge.com