Desde hace bastante tiempo, la sociedad china se ha consolidado como la que más utiliza el canal online para la adquisición de bienes y servicios, llevando años de ventaja a cualquier otro país en este campo. Solo un dato: el número de compradores vía online en China superó los 1000 millones de personas en el último año.

El desarrollo de una clase media fuerte en China implicó un aumento de la demanda de bienes de consumo, y el e-commerce ha venido a agilizar la adquisición de bienes y servicios de todo tipo que podamos imaginar. Además, gran parte de la sociedad china empezó a demandar productos extranjeros de calidad, particularmente para el consumo, y el e-commerce les permite acceder a estos productos con mayor facilidad y como se puede ver ha habido un auténtico boom en las ventas.

Pero el e-commerce puede ser un arma de doble filo si no se atienden algunos aspectos básicos como los siguientes: por lo general vender en e-commerce es una estrategia que requiere de alta inversión y tiempo; además hay que tener en cuenta que la información que el consumidor ve en el canal online tiene que coincidir con la que haya en el canal offline en caso de existir éste; por otra parte no hay que perder de vista que e-commerce y redes sociales están estrechamente relacionados en China, donde hay redes sociales para cada uno de los segmentos sociales que podamos imaginar con sus necesidad particulares de bienes y servicios a satisfacer, de modo que no hay que descuidarlas porque además proporcionan información útil del consumidor. En definitiva, la estrategia e-commerce requiere tener una actualización constante y exhaustiva pues de lo contrario estará abocada al fracaso.

Equipo EurochinaBridge